La incertidumbre
Me he propuesto a mí misma
escribir más, no como simple herramienta de “llenar” mi blog, sino como un
espacio personal de sanación terapéutica. Escribir me sana, siempre me ha
sanado, pues con cada palabra formada siento que dejo atrás lo que tengo que
dejar y da luz a los misterios de mi interior. Puede ser prosa o puede ser
poesía… pero la poesía sólo acude a mí en momentos de gran impacto emocional,
en pequeñas dosis, como una de las mejores medicinas.
El mostrarlo en mi blog no
tiene otro propósito que el de compartir, por si a alguien le puede resonar lo
que expongo.
Y abordo un tema, ligado con el
anterior post, que es esta nueva vida que he empezado hace un año. Supongo que
los aniversarios son importantes, y por eso surge esa necesidad de escribir,
como una manera de honrar esa decisión que tome en este, su primer cumpleaños.
Como los cuentos empiezan…
Érase una vez una niña enamorada de la Naturaleza, de los animales y de las
plantas, una niña que creció y decidió estudiar algo relacionado con el mundo
natural. Una niña que pasó a ser una joven que se dio cuenta que el estudio
académico no honraba a la Madre Tierra, sino que la desmenuzaba y clasificaba
obviando su poder, su magia, sus misterios y su totalidad. Una joven que
después de pasar, como muchos tantos jóvenes, por algunos trabajos que no
llenaban su alma, pensó que había encontrado por fin el trabajo de su vida. Y
con ilusión entró en ello.
Una mujer que pasó 14 años de
su vida en ese trabajo, y que desde el primer día supo que no la haría feliz.
Pero el sistema patriarcal “aprieta” en nuestro interior… De alguna manera
siento que esta etapa de mi vida fue necesaria, por aspectos prácticos, pues me
permitió formarme en otro mundo, que es llamado “alternativo”, y porque me dio
un cierta “estabilidad”, que necesitaba por diferentes circunstancias.
Agradezco y honro por tanto esos 14 años.
Una presión interna iba mostrándose
más y más evidente durante todo ese tiempo. Una voz interior que gritaba irse. Al
final, un cóctel formado por mi “aventura uterina” (el año que pasé sanando mi
útero de una supuesta grave enfermedad, a base de medicinas alternativas y un
profundo trabajo personal a través de meditaciones y visualizaciones, en los
que acudieron elementos mágicos en mi ayuda), la mezcla de estrés y
aburrimiento laboral, el encontrar al fin lo que deseaba mi alma (después de
una búsqueda altamente dispersa), acompañado de otras circunstancias
personales, provocó que finalmente decidiese dar el salto al vacío y pasar a
dedicarme a tiempo completo, ya no parcial, a los talleres de feminidad y a las
terapias holísticas.
Y aún sigo cayendo un año
después… y de ahí el título del post: “La incertidumbre”. Ni un solo momento me
he arrepentido de la decisión de dejar un trabajo estable, pero sí que puedo
plasmar todo lo que se ha ido moviendo en mi interior en consecuencia.
Existen “peligros” al amar con
todo tu ser lo que deseas hacer en el mundo. El primero es que no se cumpla, al
menos al ritmo que una desea. Y ahí es justo donde siento como todos los
patrones aprendidos, esas creencias con las que llegamos, impresas en nuestra
memoria celular, van poniendo a prueba algo muy profundo en nuestro interior.
Qué se mueve dentro, en las
entrañas…
1. No ser
“productiva”: así me he sentido, y así me siento a veces, lo confieso. En un
sistema en el que no tener un horario fijo, un jefe, unos ingresos estables (en
mi caso aún son muy pequeñitos), es como uno de los pecados capitales. Parece
no ser suficiente para la sociedad estar eternas horas creando un taller o
investigando. No es un trabajo, es un hobbie. Palabras oídas, palabras
pensadas. El sistema patriarcal dicta que es un trabajo y que no lo es. Para mi
es una pasión, llamarlo trabajo o no ya es una cuestión que poco me importa.
2. Ser una
“mantenida”: lo peor es que la he oído en boca de otras mujeres… algo que duele
mucho en el alma… El sistema no permite, y no nos permitimos tampoco, emprender
ese sueño, esa pulsión del alma, que necesita su tiempo de gestación y de
materialización, simplemente haciéndolo y siendo. Prohibido vivir de tus
ahorros, prohibido dejar que tu compañero de vida (o compañera según el caso) o
tus padres te ayuden en este viaje (personalmente, sin este apoyo estoy segura
que lo hubiese hecho igual), prohibido intentarlo, prohibido soñar… Y me viene
esa ofensa tan grave de nuestro sistema a las madres, o no madres, que se han
quedado en casa, por decisión propia o impulsadas por el momento histórico, a
las cuales no se las ha considerado jamás como mujeres “que trabajan”, como si
el llevar el sostén y la nutrición de un hogar no fuesen nada… aprovecho para
honrar a cada una de esas mujeres por existir y por dar tanto por tan poco por
parte de la sociedad (sé que la polémica está servida…).
3. “No
dejarás jamás este trabajo”. Parece que al final si… por ello, no hagas nunca
caso a nada que te digan los demás, sólo escucha tu voz interior. Frase altamente
repetida que debe quedarnos grabada en todas nuestras células. En mi caso esta
sentencia me dio fuerza (con un alto componente de rebeldía) para dar el salto.
4. La
energía del dinero y lo que se mueve con ella. Tremendo maestro… más
sentencias: Cómo puedes cobrar por estos talleres o por estas terapias ? Soy la
primera que desearía un mundo a base de un intercambio justo, pero por ahora, y
como parte de mi enorme aprendizaje en poner límites, respondo: Acaso no he
dedicado mi tiempo y mi energía en prepararlo ? Quién dicta que trabajos deben
ser remunerados y cuáles no? Hay categorías ? Tiene que ver la espiritualidad
con cobrar ? Gran tema, gran debate… Jamás he deseado grandes lujos, no forma
parte de mi ser, pero sí que merecemos ese “recibir” por ese “dar”, un
equilibrio de energías. No confundamos materialismo con supervivencia, al menos
para muchas personas que hemos decidido dedicarnos a lo “alternativo” por un
deseo del alma en beneficio de todos, es así. Y a quién se le remueva algo con
lo aquí escrito le invito a reflexionar sobre el tema.
5. La
impaciencia, y al fin: La incertidumbre. Después de la exposición, muy racional
y muy sentida, viene lo siguiente: si, muy bien… pero porqué me duele tanto
cuando se anula un taller por falta de gente o cuando algo a lo que he dedicado
toda mi energía no parece fluir? El ego se resiente, se enfada, protesta,
sobreviene una tristeza profunda, impaciencia… y el abismo de la incertidumbre.
Al final tendrán razón todos los que dicen algo sobre el ser productivo,
mantenido, no dejar jamás un trabajo estable… ? La inmensa incertidumbre… Gran
desconocida para mi hasta hace un año. En mi interior llevo una gran maestra
del Control. Caigo, pero no me desvío de mi camino. Dudo, pero sigo andando.
Tengo miedo, pero le llevo de la mano mirándole de cara.
Exposición
final: navegar en la incertidumbre me está llevando a bajar a menudo al
inframundo de Innana, lo que me está nutriendo como mujer abundantemente. Me
está mostrando tantas cosas la maestra Incertidumbre, que tan sólo puedo
inclinarme ante ella. Y la clave de todo: la Confianza, esa fuerza mágica, esa
aliada que este sistema también aplaca, pues el confiar es crear una realidad,
y supongo que no interesa crear nuevas realidades, y si son variadas e
individuales, menos aún. Y como no, el Amor… la otra gran fuerza que nos
permite confiar, la base de todo. Por ello, mujer y hombre que me lees, te
invito a que des el salto también, si es el deseo de tu alma. Es un viaje
apasionante y profundo, en el que el final no importa, sino el camino. Torrentes
de creatividad vienen en tu ayuda. Y dejarnos llevar plácidamente por el ritmo
del Universo, en el que sólo importa el momento presente... Me inquietaba
profundamente marchar de este mundo sin haberlo intentando… ahora ya podré
descansar en Paz.
Bendiciones.
m'ha agradat llegir les teves reflexions, en un moment en que jo ara mateix també pateixo incerteses i estic aprenent a no tenir por i a agafar confiança.
ResponEliminaM'has fet pensar en les mares al dir allò de "por dar tanto por tan poco", i en el sacrifici que han hagut de fer les nostres mares per sortir endavant.
Una abraçada!!
Una abraçada gran !!! I moltes gràcies per les teves paraules... snif...
ResponEliminaEva, ets valenta per travessar aquest mar d'incertituds amb tanta decisió, amb tants dubtes. La natura no és matemàtica: de vegades grans esforços semblen que no es corresponen amb els resultats aparents. I, de sobte, quan no t'ho esperes, la vida està plena de sorpreses i resulta que hi ha algú o alguna que et reconeix. A mi com a pare i com a educador m'ha passat això sovint. és com l'amor: tu el dónes sense esperar recompensa i segons com, sembla que no te'l reconeguin, fins que, un bon dia, et ve retornat mil-i-una vegades. Però has d'estar preparat com si aquest amor mai fos reconegut. És dur, és difícil aquest aprenentatge.
ResponEliminaJuanjo, ets un savi. Ara per ara només puc dir que estic gaudint d'aquest viatge personal amb alegria al cor, a banda de les incerteses i "els baches". És un plaer el dia a dia compartit amb altres persones, mica a mica, com una tortugueta, avançant segura i a poc a poc. Moltes gràcies per les teves paraules i fins aviat !
ResponEliminaCertes coses costen d'arrancar però ja estàs volant. Aquesta travessia sempre tindrà moments de tot tipus, i en els moments que trobis de llibertat absoluta i de creuades energies amb els demés seran els que més t'ompliran. Per això estàs treballant. Per això t'estàs oferint. Però per tots aquests mars procel.losos que hauràs de creuar, no et deixis dir mai que si ets diferent o que et mantenen... Aquestes coses no ens interessen als qui passen per tot el que volem passar... O creus que li van preguntar a Crist abans de passar el seu particular via crucis?? Endavant i t'envio tota l'energia, i espero que ens puguem anar compartint aquestes xarxes que ja tenim creuant-se---
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